Proyectos en el (fondo del) cajón

A la historia de las ciudades pasan los grandes proyectos que se piensan, nacen, evolucionan y, en algún caso, terminan siendo destruidos. Edificios emblemáticos de arquitectos famosos, parques que revitalizan zonas periféricas, operaciones urbanísticas que crean o transforman barrios enteros… En Montilla, son perfectamente reconocibles los pisos de ladrillo visto de Rafael de la Hoz, la plaza de la Rosa con sus sucesivas transformaciones, el Palacio de los Marqueses de Priego y sus 5 siglos de historia o la parcelación de los terrenos circundantes al Parador de Riobóo. Pero… ¿quién recuerda los proyectos de la plaza de toros, el Hotel Gran Capitán o el Museo del Vino en el Castillo?
Veamos, en este post, algunos de esos proyectos que nunca se llevaron a cabo.
Museo del Vino de Andalucía
Uno de los históricos deseos de la localidad, como no podía ser de otro modo, se refiere a la creación de un museo dedicado al vino en una de las zonas de mayor tradición enológica del país. Y es que desde 1994, la idea que venía rondando algunas cabezas vinícolas de la ciudad se fue haciendo patente a nivel municipal, acariciando el Consistorio un esbozo de lo que podría ser ese futuro Museo del Vino que, 30 años después, continúa siendo un proyecto.
Se habló, en aquel primer momento, de su ubicación en la planta alta del Mercado de Abastos –planta que de por sí daría para una separata de “proyectos inacabados.”– Hasta tal punto se tenía el proyecto en mente (y solo eso) que en un artículo del Boletín de Información Municipal número 131 se decía que “la puerta principal imitaría a la de una bodega, con ladrillo visto, y las puertas serían las que en su día pertenecieron a la llamada “Casa de los Hachazos”. Ese mismo artículo planteaba las líneas museológicas, con los contenidos básicos y la distribución de las salas.
El Museo del Vino fue evolucionando, siempre sobre proyecto, hasta que tras la adquisición del Castillo por parte del Ayuntamiento en 1998, se decidió instalar el espacio museístico en este histórico inmueble, el primero habitado en la localidad. Así, tras la firma de un Protocolo de Colaboración entre las Consejerías de Agricultura y Cultura de la Junta de Andalucía y el Ayuntamiento en febrero del año 2000, distintas obras de rehabilitación y acondicionamiento del edificio tenían como último objetivo su recuperación para albergar el Museo del Vino. De hecho, desde 2002 se encuentra inscrito en el Registro de Museos de Andalucía, si bien de forma provisional.
En 2014, Diputación de Córdoba financió parte de las obras de acondicionamiento de la primera planta del Castillo-Alhorí, así como su entorno, dentro de su acondicionamiento como futuro Museo del Vino. Esta primera planta incluiría una exposición permanente dedicada al Gran Capitán, proyecto que sí parece estar a punto de fructificar tras años de sufrido trabajo.
A comienzos de 2017 se anunciaba la creación de un Museo del Vino Montilla-Moriles en plena Judería de la capital cordobesa, frustrando así –al menos, sobre el papel– las esperanzas de nuestra localidad por recuperar aquel proyecto de Museo del Vino.
En un primer momento, se preveía la apertura del espacio en la primavera de 1995. Primavera que no llega…

Plaza de toros de Peña Taurina Las Camachas
Montilla, ciudad con cierta afición taurina y varios diestros encumbrados a nivel autonómico, vio a principios del siglo XX desaparecer la plaza de toros de la Calle El Horno. Igualmente, el devenir posterior eliminó la escuela taurina donde en 1929 debutó como becerrista Manolete, situada en el solar de las futuras Bodegas Gracia, junto a los Arcos de la Puerta de Aguilar.
Con aquella lejana memoria, y desde la creación de las novilladas de la Feria en julio de 1992 celebradas en plazas desmontables en la explanada de Avenida de la Constitución, durante muchos años se barajó la posibilidad de construir una plaza de toros permanente en la localidad. Así, en verano de 1994 el arquitecto Antonio Martínez González presentó un proyecto con reminiscencias de otros edificios históricos de Montilla: Ayuntamiento, Palacio Ducal o Iglesia de San Francisco Solano.
Contaba la plaza con una superficie cercana a los 9.000 metros cuadrados y se esperaba instalar en el recinto ferial, justo donde desde ese momento se instalaban las atracciones y barracas de Feria. Con un aforo de 6.000 espectadores y unas instalaciones a la vanguardia del momento, aquel proyecto quedó como un sueño de la Peña Taurina La Capea y la Tertulia Las Camachas, pese a que el runrún del coso montillano siguió durante muchos más años.
Y es que en noviembre de 2002, así como en enero de 2003 y en junio de 2004, sendos artículos en Diario Córdoba volvían a sacar a la luz el proyecto, ahora modificado por el arquitecto Luis Giménez Soldevilla pero con la misma base que venía circulando más de una década. Incluso se llegó a hablar de la posible contratación de su construcción, en terrenos municipales cercanos al Polideportivo, por algo más de 2 millones de euros.
Los aficionados al capote vieron desinflarse la idea de que Montilla tuviese plaza de toros permanente, y poco más se volvió a hablar del asunto. No obstante, la sociedad Plaza de Toros de Montilla, S.L. mantuvo su “actividad” hasta 2008, fecha en que se produjo el cierre provisional de la empresa; revocándose el NIF diez años más tarde.

Ronda Norte
Mayo del 95. El Partido Socialista se presentaba a las elecciones municipales con José Luis Márquez encabezando una candidatura cuyo programa electoral destacaba la “ejecución de la carretera de circunvalación de la Ronda Norte, desde el Arco de Santa Brígida hasta Avda de Europa”. También el Partido Popular, con Florencio Luque a la cabeza, plasmaba su compromiso a buscar financiación a ese proyecto a través de fondos FEDER.
22 años después de aquella iniciativa, y tras muchas vicisitudes y despropósitos, en 2007 comenzaron las obras del primer tramo de esta ronda de circunvalación, actualmente el único ejecutado, entre la rotonda de Santa Brígida y la calle Córdoba. Las sucesivas fases de esta carretera, hasta llegar a la Nacional 331, deben pasar por expropiaciones, desarrollos urbanísticos y fuertes inversiones, por lo que no parece un proyecto visible –al menos en su totalidad– en los próximos años, pese a venir siendo reclamado por todos los grupos políticos municipales por su importancia en la regulación del tráfico y el modelo de ciudad.
Hotel Gran Capitán
Corría el año 2006 y, en plena burbuja inmobiliaria española, Montilla no era ajena al fenómeno expansionista. Con un Plan General de Ordenación Urbanística que inició su tramitación en 2004 y que preveía la construcción de miles de nuevas viviendas en la localidad, la realidad hizo que casi desde su aprobación inicial se viese obligado a sucesivas innovaciones y adaptaciones.
Una de ellas tuvo su origen en este proyecto inacabado. La promotora cordobesa Coproinm 2001, S.L. encarga a la arquitecta local Mara Portero un diseño rompedor en pleno centro de Montilla. El resultado fue un espectacular proyecto para construir un hotel de cuatro estrellas, 42 viviendas plurifamiliares entre medianeras, varios locales y 2 sótanos entre las calles Médico Cabello y La Parra. Para que nos hagamos una idea, el edificio que durante décadas albergó la bodega vieja de Cobos.
Pese al optimismo reinante en ese momento, el proyecto se fue enfriando tras la euforia inicial, el ladrillo vio caer su cotización a partir de 2008 y, ya con la crisis económica casi apurada, en 2014 se anunció la venta del solar a Mercadona, donde la cadena empresarial trasladó su supermercado en la localidad tras una inversión total de casi 10 millones de euros.

Hotel Palacio de Medinaceli
Aquel desarrollo expansionista de la primera década del siglo XXI, unida a una patente necesidad de plazas hoteleras en la localidad provocó que, pese al fracaso del proyecto del Residencial “Gran Capitán”, la firma local EdifiQa plantease la rehabilitación del Palacio Ducal de Medinaceli para su transformación en hotel.
Corría el año 2011 cuando la arquitecta montillana Carmen Ruz, tras varios meses de trabajo, presentó en la bodega Pérez Barquero el proyecto “Hotel Palacio de Medinaceli” ante un nutrido grupo de personajes del mundo político, empresarial y turístico. Pese a las buenas críticas que recibió la presentación y la aprobación inicial del proyecto por parte de los organismos autonómicos de protección de Patrimonio Histórico, la alta inversión necesaria –alrededor de 8 millones de euros- y el duro momento económico que vivía el país fue poco a poco desinflando este proyecto de hotel de cuatro estrellas, 43 habitaciones y restaurante, que posteriormente se planteó por fases y, finalmente, quedó descartado.
El inmueble, con la propiedad muy fraccionada, fue parcialmente adquirido en 2021 por el Ayuntamiento de Montilla, estando pendiente en la actualidad de su recuperación para disfrute público. Quién sabe si con el uso que no hace mucho se pretendió…

Parque Logístico Fuente de la Higuera
En noviembre de 2010, el Pleno del Ayuntamiento aprobaba los estatutos de la Fundación Plataforma Logística Modal de Andalucía. Bajo esta pomposa denominación se escondía un no menos ostentoso proyecto. Y es que el macrocentro de distribución internacional de mercancías exigía una superficie superior a los 3 millones de metros cuadrados y una inversión estimada de casi 150 millones de euros.
De iniciativa privada pero con la mencionada participación del Ayuntamiento, primer patrono en adherirse a los Estatutos, en su momento se habló de una veintena de posibles socios para poner en marcha este proyecto, entre los que se encontraba la firma montillana Grupo AE Maderas. No obstante, desde su presentación se vio envuelto en una curiosa polémica sobre su proclamación como centro de Andalucía, en todos los sentidos; y ciudades como Antequera o Puente Genil disputaron ese carácter al proyecto montillano.
Se desvelaron incluso algunos detalles del megaproyecto logístico: dispondría de zona franca, control aduanero, espacios de inspección de contenedores, servicios de exportación y todos los necesarios para llevar a cabo este tipo de distribución desde el centro de Andalucía hasta cualquier zona del mundo. Un auténtico puerto seco aprovechando la ubicación junto a la vía férrea y la autovía A-45.
Además de la citada firma montillana, los grupos Montealto (Córdoba) y Gabriel Ravello (Valencia) se interesaron pronto en un proyecto que, pese a los esfuerzos iniciales, quedó en el cajón como una gran oportunidad perdida en el sector logístico.
Palacio de Congresos y Exposiciones en el Parador
El antiguo Parador de Riobóo es otro de los edificios más comentados de las últimas décadas en la localidad. Tras adquirir la propiedad del inmueble en 2002, ya en un evidente estado de deterioro estructural, la promotora Hermanos Goce presentó un proyecto para construir un gran residencial en el edificio y su entorno: casi un centenar de viviendas de lujo, un hotel de 50 habitaciones y un centro de congresos y exposiciones, con capacidad este último para acoger a 1.500 personas.
Pese a que otra promotora, Maprocon, S.A., desarrolló 6 años más tarde el «Plan Parcial El Parador» consiguiendo la urbanización del entorno y su parcelación lista para construir, el ambicioso proyecto del Palacio de Congresos acabó con el antiguo edificio enológico arruinado, varias órdenes de ejecución a sus propietarios y un proyecto, otro más, en el cajón.
Finalmente, el Ayuntamiento se hizo con el inmueble a través de una permuta por otros terrenos y, tras una primera intervención de consolidación estructural y rehabilitación de la envolvente, se trabaja ya en una segunda fase para poner en uso el peculiar edificio.
Polígono Industrial El Cigarral
Casi una coletilla en los programas electorales de todos los partidos municipales desde hace 30 años; una constante comidilla en cualquier debate municipal sobre desarrollo económico o impulso empresarial de la ciudad. La creación de un polo industrial en el Pico Cigarral es un sueño frustrado de toda la población. Y es que, pese a la adquisición en 2002 de casi la totalidad de la finca (370.000 metros), nunca se llegó a estar cerca de desarrollar urbanísticamente esta zona de la población.
Muchas esperanzas se tenían en la época de bonanza económica a principios del siglo XXI en la ejecución de un polígono junto a la circunvalación de la ronda este, variante de la A309, y muy próxima al centro de la ciudad. Incluso se hablaba de importantes empresas decididas a apostar por esta iniciativa, así como de la posible gestión del suelo a través de la Empresa Pública de Suelo de Andalucía (EPSA).
Lamentablemente, el alto coste de su urbanización, junto a la aparición de serios problemas técnicos y, lógicamente, la posterior crisis económica, terminó dejando inacabado este eterno intento de expansión industrial de Montilla.
Promesas electorales
Mención aparte, sin duda, merecen los proyectos que se plantean en los programas electorales de los partidos que disputan la gestión municipal cada cuatro años. Bien por “exóticos”, por su nulo estudio de viabilidad o por no alcanzar el poder el grupo proponente, la mayoría de estos proyectos no pasan de alcanzar un par de líneas en esos cuadernillos con los que los partidos intentar camelar a los electores. Veamos algunos de esos ejemplos:
- Parque Periurbano “Laguna de Jarata” (PSOE, 1995)
- Hotel de Empresas (PA, 1995)
- Aparcamiento subterráneo en Plaza Obispo Pérez Muñoz – San Agustín (IU, 1999 – 2015 – 2019)
- Centro Comarcal de Transportes (PSOE, 2007)
- Edificio “Verde Estrella” (PSOE, 2007)
- Centro Cívico Emilio Canalejo (PP, 2019)
- Albergue Juvenil (PSOE, 2015 – IU, 2019)
Todos ellos, inacabados o incluso inexplorados, siguen en algún cajón. Otros, no obstante, parecen algo más viables, a medio o largo plazo. ¿Serán realidad algún día?